Debido a una enfermedad, mi madre tuvo que ser ingresada en el hospital durante casi un mes. Su hermana Eva se ofreció a venir a nuestra casa para ayudar en lo que pudiera, iba al hospital para atender a mi madre y a la vez atendía nuestra casa. Vivía en Valencia y estaba divorciada, había conseguido una buena pensión de su marido, por tanto no necesitaba trabajar y podía permitirse pasar una larga temporada fuera de su casa.